¿Has sentido las piernas cansadas?, ¿Están apareciendo o tienes varices en tus piernas?
Cuando existe un mal funcionamiento del sistema venoso, la vena se vuelve más débil y, a la hora de tener que devolver la sangre al corazón, se encuentra con algunas dificultades. Esto es lo que a la larga produce esta dolencia tan común. Se estanca la sangre, se dilatan las venas, aparece un molesto escozor y los tobillos se hinchan. La carga genética es muy importante, la herencia te puede suponer un 45% de probabilidades de que padezcas la insuficiencia venosa y si has tenido hijos, los embarazos son causa de origen o empeoramiento. Aunque también se da en hombres, la gran mayoría de los que padecen insuficiencia venosa, son mujeres.
Tenemos que tener claro que la insuficiencia venosa no se puede curar pero si puedes detener su desarrollo y mitigar las consecuencias.
¿Qué puedes hacer en el día a día para prevenir o impedir que se desarrolle esta insuficiencia?
Creo que hay cosas que te van a sonar de algo:
- Hacer ejercicio físico regularmente adaptado, eso sí, a las capacidades de cada uno. Lo que no falla nunca es andar.
- Cuidar nuestra alimentación evitando los alimentos que debilitan las paredes venosas como los embutidos, las grasas, el marisco, las carnes rojas y las especias fuertes.
- Evitar el sobrepeso.
¿Qué dieta debemos llevar para tener un sistema circulatorio más fuerte?
El objetivo es atacar los radicales libres ya que van a ir a las zonas inflamadas del organismo y van a aprovechar esa debilidad para atacar las paredes de las venas, con lo que lo más indicado es ingerir alimentos que tengan muchos antioxidantes:
- En la lucha contra los radicales libres, la vitamina E es muy importante y la encontramos en: los cereales integrales, los frutos secos, germen de trigo, yema de huevo, hortalizas de hoja…
- La vitamina C, la encontramos en naranjas, limones, mandarinas, kiwis, piña, moras, tomate..
- La vitamina A que la encontraremos en frutas y verduras ricas en carotenoides y betacaroteno.
- El sistema venoso va a verse reforzado con alimentos ricos en flavonoides que es uno de los nutrientes esenciales para la circulación. Los encontramos en: manzana, pera, col, apio, cebolla, lechuga, brócoli; en el romero, la salvia, la cúrcuma y el jenjibre.
- El té verde y el ajo son también potentes antioxidantes.
¿Por qué es necesario ingerir ácidos grasos insaturados?
Porque van a ayudarte a mantener el colesterol a raya y esto ayuda a la flexibilidad de las paredes venosas. De ellos derivan el Omega 3 y el Omega 9. Son los que conoces como ácidos grasos esenciales. El organismo no los produce, por eso hay que consumir alimentos que los contengan como: el salmón, el atún, la caballa, la sardina, los aceites vegetales en crudo y frutos secos como las almendras, las nueces, las semillas de calabaza y los cacahuetes. También puedes tomarlos como suplementos alimenticios
Hay también otra serie de alimentos que nos ayudarán con la retención de líquidos como las peras, las manzanas, el melón y la sandía y también las uvas. Entre los vegetales más diuréticos están la alcachofa, el apio, la berenjena, el puerro, los espárragos, el ajo y la cebolla. Las frutas y verduras ayudan a reforzar el colágeno de las venas.
Una parte muy importante, como ya hemos visto, son los hábitos alimenticios y la suplementación, pero hay otra parte que ayuda a mantener a raya todos los síntomas: el Masaje Circulatorio y la aplicación de crioterapia y el Drenaje Linfático Manual. Formulaciones aromaterapéuticas especificas para problemas circulatorios que nos van a ayudar mucho a la hora tratar este tipo de problemas.
En un próximo artículo profundizaremos más a cerca este tema, ya que con el calor los síntomas se agudizan y es tiempo de poner remedio a esas incómodas molestias.
Fuente: Tratamiento natural de las piernas cansadas y varices del Dr. Ramón Roselló